Como comentábamos en un artículo anterior sobre si el punto G existe, definimos que el punto G es esa pequeña zona erógena detrás del hueso púbico que, con la excitación y estimulación suficiente, se inflama tomando la forma de un pequeño botón.
Para estimular esta zona se puede hacer de forma manual o con el pene, siendo la manual la más efectiva.
La estimulación manual se logra al introducir uno o dos dedos dentro de la vagina con la palma hacia arriba y doblando los dedos ligeramente, de forma que estos formen un pequeño gancho. El punto G, se encuentra en la parte superior de la vagina, casi inmediatamente después de entrar a ella, justo detrás del hueso púbico. Si no sabes de qué hueso estamos hablando, desliza tu mano desde tu ombligo hacia tus genitales, si presionas hacia dentro, sentirás algo suave debido a tu estomago, ya a la altura del vello púbico, es cuando sentirás una estructura dura cerca de la superficie. Eso es el hueso púbico.
¿Cómo estimular el punto G?Si la mujer ya se encuentra excitada, se sentirá como un pequeño bulto esponjoso en esta zona con una sensación rugosa. Si intentas estimular esta zona sin que la mujer esté excitada, causaras molestias e incomodidad.
Cuando empieces a estimular este punto, una de las primeras reacciones que sentirá la mujer es la “urgencia” de orinar; de la nada sentirá como si tuviera ganas de ir al baño. Hazle saber a tu pareja que no son reales, son el resultado de la estimulación directa del Punto G y un paso más cerca de la eyaculación femenina.
Si tu pareja desconfía, entonces la próxima vez que intentes estimular el Punto G, pídele que vaya al baño antes.
Lo anterior es resultado a que, dentro del órgano genital femenino, los nervios que regulan la vejig, de cierta manera están conectados con el Punto G y regiones cercanas a este, por lo que cualquier estimulación directa y profunda de este lugar creará la misma sensación de presión que la de una vejiga llena.
Existen varias formas de estimular el Punto G, inclusive puede que tu ya hayas encontrado la forma adecuada. Sin embargo, es necesario saber que lo que funcionó una vez puede que no funcione otra vez, es por eso que aquí te mostramos otras formas de estimulación.
Te recordamos que el Punto G puede ser estimulado con el pene o con la mano, siendo la última la más sencilla, por lo que en este artículo hablaremos sobre este tipo de estimulación.
Si jamás has estimulado el Punto G, debes entender que es un proceso de aprendizaje como todo. No intentes apresurarte a intentar todo una sola noche, tómate tu tiempo. Si ya has pasado diez, veinte o trinta años de sexo sin saber estimular el Punto G, ¿qué más da tardar unas semanas en incorporarlo a tu repertorio sexual de forma adecuada?
A pesar de que hay diferentes posiciones de la mujer para estimular el Punto G, la forma más sencilla de alcanzar o localizar es que la mujer se encuentre acostada sobre su espalda con las piernas abiertas, inclusive de ser posible, una pequeña almohada debajo de la espalda baja ayudará a la posición.
Los dedos utilizados principalmente es el dedo índice, el medio, el anular o el dedo pequeño, en ese orden los dedos son 1, 2, 3 y 4.
Todos los movimientos anteriores pueden ser realizados con uno o todos los dedos, dependiendo de cada mujer. Algunas mujeres prefieren ser penetradas poco a poco, y cada vez con más dedos, mientras que otras, un dedo será más que suficiente.
Lo más común es estimular con 2 dedos, el 1 y 2, aunque a veces es cansado por lo que se puede cambiar al 2 y 3.
¿Cómo estimular el punto G?Una vez la mujer en esta posición, existen 5 movimientos básicos de la mano para estimular.

  1. Dentro y Fuera. Ésta es una de las primeras formas de empezar a estimular el Punto G, este movimiento consiste simplemente en insertar el o los dedos dentro de la vagina una vez que está bien lubricada, y luego retirarlo, justo como si fuera la penetración de un pene. Recuerda que la vagina así como tus dedos deben estar bien lubricados y cálidos, ya que los dedos fríos no son del agrado de las mujeres. Para poder estimular directamente el Punto G de esta forma, en lugar de entrar de forma recta o totalmente horizontal, intenta entrar un poco inclinado de abajo hacia arriba. Si lo quieres ver de otra forma, tus dedos en lugar de estar completamente acostados o rectos a tu mano, es mejor que formen un ángulo de 45 grados y el movimiento de tu mano, debe ser de abajo hacia arriba, en lugar de atrás hacia adelante. Si has logrado encontrar el Punto G, intenta seguir con este movimiento pero que tu mano busque diferentes formas y movimientos, es decir, izquierda a derecha. Recuerda empezar con un sólo dedo, si tu pareja lo desea, introduce 2, 3 y hasta 4 dedos con este movimiento. De igual forma, empieza lentamente y conforme la excitación vaya aumentando aumenta la presión, la velocidad y crea diferentes ciclos de movimiento, quizás primero rápido, luego lento, luego rápido, lento, rápido, rápido, lento, etc.
  2. Sostener. Aquí nos referimos a simplemente mantener tu dedo o dedos, haciendo presión sobre el Punto G directamente, esto puede ser haciendo presión sobre la punta de tus dedos solamente o con todos tus dedos. Al ser un movimiento suave, este es la forma perfecta de ayudar a la mujer a que se relaje y se abra a las diferentes sensaciones que está a punto de suceder, de igual forma, esta forma es excelente mantener de extender un orgasmo cuando la mujer lo está teniendo y poco a poco hacerla volver en sí.
  3. Circulares. Otra forma de estimular es haciendo movimientos circulares, o asemejar los movimientos como los de un parabrisas de un coche, que son similares a un semicírculo. Intenta hacerlo tanto de izquierda a derecha como viceversa. Si tienes dos dedos introducidos, puedes hacerlo con ambos hacia el mismo lado, o centrar los dedos en el Punto G, y abrirlos; de esta forma un dedo se moverá hacia un lado y el otro en dirección opuesta. Otra variación es hacer pequeños movimientos con la punta de los dedo. Esta es una gran técnica para aumentar la estimulación. Aumentar la presión y la velocidad es la forma de crear nuevas sensaciones con esta técnica.
  4. “Ven hacia mí”. Muchas mujeres disfrutan la presión de los dedos sobre el Punto G, por lo que este movimiento es ideal. Este es un movimiento similar al del “Dentro y Fuera”, pero con una variación. Introducirás con el 2 dedo lo más profundo que puedas, cuando ya estés ahí, curvearas este dedo de forma que genere un pequeño gancho. Harás el movimiento hacia afuera, pero mantendrás esta pequeña curva. De esta forma, con el movimiento hacia dentro y hacia afuera, harás presión sobre todo el Punto G con tu dedo teniendo la posición del “Ven hacia mí”.
  5. Toqueteo alternado. Este movimiento tiene cierto grado de dificultad y es sumamente cansado, pero muy efectivo. Similar al movimiento uno, necesitas tener 2 dedos dentro de la vagina, una vez dentro de forma recta lo que harás es un movimiento alterno, es decir, el que ejercerá presión será el dedo 1 mientras que el dedo 2 está separado del punto G. Cuando el dedo 2 regrese a tocar el Punto G, el dedo 1 será el que se retire. Intenta el movimiento ahora mismo, extiende tu mano, y haz que el dedo 1 suba y luego cambia, para que el dedo 2 suba y el 1 baje, como si tus dedos estuvieran pataleando. Este mismo movimiento será el que harás dentro de la vagina apuntando al Punto G, en un inicio será difícil pero con la práctica lograrás perfeccionarlo.

Ahora que conoces los 5 movimientos básicos puedes practicarlos. Una forma sencilla de hacerlo es enseñárselos a tu pareja para que ella practique sola y se acostumbre. Te recordamos que estos movimientos, si jamás los has utilizado, serán difíciles de implementar en un inicio, por lo que toma tiempo y práctica.
La mejor forma de excitar y hacer que una mujer tenga un orgasmo es jugando con lo que acabas de aprender. Enséñale y dile que quieres aprender y practicar. Es necesario que los dos vean esto como un juego y no generen expectativas. Relájense y disfrútenlo, será la única forma de que en realidad podrán llegar lejos.